#menosusarytirar
<<No subestimes el poder que tienen los pequeños gestos de tu día a día>>
Pajita, pitillo, popote, pitillo, caña... muchas formas diferentes de decirlo según el país ;) pero el mismo objetivo al decir el mágico «SIN«, ya que lo importante es que ¡no necesitamos ese tubo para sorber!
Y en nuestras manos está no usarla y por lo tanto evitar desecharla. No vale con dejarla a una lado y luego tirarla (de hecho es incluso más absurdo). Cuando te la vayan a dar en un bar, no se te olvide el «¡sin pajita por favor!«. Habrá muchas veces en las que te miren en plan «¿por qué insiste tanto esta chica en no querer pajita…?», otros de «ya está la típica ecofriendly pesada»… pero otras veces experimentarás momentos bonitos en los que el/la camarero/a te regala una sonrisa porque sabe por qué lo haces ツ Y esos momentos ganan a los otros, sin duda.
Si en casa a tus hijxs les gusta lo de beber con pajita y a ti te saca de quicio el constante derroche de plástico de un objeto que usan durante 10 min, ¡compra unas reutilizables y problema solucionado! Ell@s seguirán contentos y tú, también. Aparte de las típicas de plástico duro las hay chulísimas de cristal y de bambú. Si yo bebiera con pajitas me haría con unas reutilizables de bambú pero ya!
Cuando estás por ahí tomando algo hay veces que se te puede olvidar pedir tu bebida «sin» o puede pasar que te traigan la bebida a la mesa y no supieras que venía con pajita (merde!). Porque ahí sí que la has fastidiado, va a ir a la basura directa :'(
Peeeero hay una pequeña solución, ¡guárdalas!. Si tienes hij@s o amig@s, familiares con niñ@s, guarda las pajitas que no pudiste evitar y cuando tengas un par se las llevas para que las incluyan en su caja de materiales para hacer manualidades. Ellos seguramente sabrán qué hacer y crear jeje pero hay cientos de proyectos DIY e ideas en internet, te sorprendrías. Simplemente google it …
Puedes pasar un fin de semana estupendo con tus hijxs o sobrinxs haciendo manualidades y preparando esta lámpara para su mesita de noche.
En un bar al que voy a menudo ponen puñeteras pajitas negras, además dos (debe ser la última moda). Procuro siempre decir ¡Sin pajita por favor! pero a veces se me olvida. Pues cuando me traen el vaso, saco las pajitas las seco un poquito y ¡al bolso!. Cuando tenga suficientes me hago esta pedazo de lámpara chula que por cierto se ha hecho un amigo mío para su casa nueva. Mola mil:
Como ves, ¡decir NO a las pajitas sólo trae cosas buenas! :)